Esta
pregunta no es fácil de contestar porque nunca vas a saber qué es lo que
realmente te hace feliz. Nos enseñan a encontrar la felicidad en el éxito y se
olvidan de contarnos que eso sólo nos llevará a la insatisfacción. Ser feliz es
disfrutar de los momentos que el presente nos brinda.

Cuando
me hice mayor tuve muy claro que quería ser diferente, aun sabiendo todos los
inconvenientes de la incomprensión que genera ser distinto. Porque si seguía
los cánones establecidos por los demás siempre me frustraría, bien porque las
cosas no me saldrían como a los demás o bien porque a los demás no les salen
las cosas bien.

He
tomado muchos caminos pero todos bajo la misma premisa: SER FELIZ TODOS LOS DÍAS DE MI VIDA. Y
tú dirás: ¡eso es imposible! Y yo te garantizo que no es difícil si uno pone actitud ante la vida. Y vuelvo a
la frase del inicio: ¿Qué me hace feliz? Nada de lo que estarás pensando. Ni el
Bentley, ni la mansión en Beverly Hills, ni la tiara de diamantes. Lo que me
hace feliz son los instantes. Una sonrisa del camarero cuando te despides de
tomarte el café de primera hora, que el autobús llegue cuando aterrizas en la
parada, que tu jefe te reconozca un trabajo bien hecho, que tu amigo te premie
por tu tartar, que tu madre te escriba un bonito mensaje, que tus amigas te
pidan tu bebida favorita sin preguntarte, que
mis animales mueran de alegría cuando llego a casa. El culmen de esta
felicidad, es sentirme querida y poder disfrutar de mis salidas gastronómicas.

No vivo pensando
en lo que tendré porque lo que ya tengo me hace feliz. Me enseñaron que la vida
es un viaje y hay que disfrutarlo a muerte. ¿el destino? ya llegaremos,
mientras tanto, disfruto de este nigiri con foie que está buenísimo, de las
llamadas matutinas con mis amigas que me alegran la mañana, de los consejos de
mis seres queridos que me hacen resetear el sistema, y de la buena música que
tengo en mi spotify, que me hace ir a sitios inigualables.

Disfruta del
viaje, ese camino que te lleva al
lugar adonde quieres llegar.

Y para disfrutes,
ver buenas películas. Yo no entiendo de cine pero si sé cuando el cine me
llega, me cala y me hace mirar la vida con otros ojos. Es el caso de Vivir
es fácil con los ojos cerrados, una historia que habla de la felicidad.

En septiembre de
1966, John Lennon se fue a Almería a rodar la película “Como gané la guerra”.
El Beatle se encontraba superado por la fama que había alcanzado el grupo y
decidieron hacer un break en su proyecto musical. El éxito no les hacía felices.

Juan Carrión, un
profesor de inglés de un humilde colegio utilizaba las letras de las canciones
de los Beatles para enseñar el idioma. Unió su pasión por la banda británica
con sus ganas de hacer feliz a sus estudiantes. Tal era su devoción por los
escarabajos que tomó rumbo a Almería para tener la oportunidad de charlar con
Lennon. En su encuentro, Juan le transmitió su metodología de estudio a la que
el Beatle quedó impresionado.

Lennon no se
enamoró de Almería, pero si compuso en sus seis semanas de estancia uno de los grandes temas de los
Beatles: “strawberry fields
forever”. A partir de ese encuentro, Los Beatles incluyeron las letras
de las canciones en los LP´s gracias a Juan Carrión.

La película es
deliciosa por la historia que narra, por la excelente fotografía, los diálogos
sumamente enriquecedores y la maravillosa interpretación de sus actores.
Enhorabuena David Trueba por hacer una película tan maravillosa.

La vida te va a
regalar momentos felices y tristes. Está en tu actitud, el poder de hacer de todos esos momentos  una
vida plena o una vida frustrada. Vivimos una vez, así que ya sabes, empieza por
sonreír desde este momento.